Steven Seagal, el icónico actor famoso por sus roles en películas llenas de acción, es un nombre familiar para muchos. Su interpretación de un protagonista fuerte e imponente es una imagen familiar en la pantalla grande, complementada por su excepcional destreza física y dominio de las artes marciales.
Casado cuatro veces, el encanto magnético de Seagal siempre ha atraído la atención de admiradores, lo que resultó en siete hijos. Hoy, nos adentramos en la vida de una de sus hijas, Arissa Lebrock.
Nacida en 1993 de la tercera esposa de Seagal, una exmodelo, la infancia de Arissa estuvo marcada por la separación de sus padres cuando tenía solo un año.
Abrazando sus curvas, Arissa encontró su nicho como una exitosa modelo de tallas grandes, colaborando con agencias de renombre, diseñadores y adornando las portadas de publicaciones de moda. En la pasarela, irradia confianza y empoderamiento, abogando por el amor propio y la aceptación.
Más allá de su carrera como modelo, Arissa comparte la pasión de su padre por las artes marciales, participando activamente en disciplinas como jiu-jitsu y taekwondo, e incluso compitiendo en torneos.
A pesar de este interés compartido, Arissa mantiene una relación distante con su padre, incapaz de reconciliarse con su partida de la familia.
Los intereses de Arissa se extienden más allá del mundo de la moda y el combate, ya que está profundamente comprometida con el bienestar animal, contribuyendo generosamente a causas benéficas. En casa, mima a su querido chihuahua, Chupa, que ha ganado bastante popularidad en Instagram.
A pesar de su persona pública, Arissa valora su privacidad, optando por mantener su vida personal fuera del foco de atención. Para ella, algunos aspectos de la vida son mejor mantenidos en privado, lejos de miradas curiosas.